La inteligencia es definida como una facultad para entender y resolver problemas aplicando conocimientos. Y si así se considera usted, muy seguramente aplica estos hábitos en su vida diaria.
Según Encyclopedia Brittanica ser inteligente no sólo se trata de tener unas cualidades mentales para aprender y experimentar sino también de adaptarse a nuevas situaciones, comprender y manejar conceptos abstractos, y utilizar el conocimiento para manejar el contexto.
Es por eso que en ocasiones se pueden cometer actos absurdos o quizás estúpidos, pero el éxito para salir de ellos o ponerlos a favor, es la clave.
El portal web Acción Preferente señala siete hábitos que hacen las personas inteligentes a diario:
1. Se enfocan menos en sí mismos: La frase “no eres el centro del mundo” puede resumir un poco lo que sugiere este tip. Pero las personas inteligentes “entienden que la gente que está a su alrededor son los que dan apoyo y generan oportunidades”, según señala el portal web.
Esto, porque saben que para el desarrollo personal y profesional, pueden contar con la ayuda y contribución de los demás en sus proyectos.
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2. Se consideran a sí mismos como los que menos saben: Pensarse como el ‘más sabio’ hace que uno mismo se cierre a nuevas posibilidades de aprendizaje. Vale recordar la famosa frase de Sócrates “sólo sé que nada sé”, para resumir este consejo.
El conocimiento puede ser algo infinito y la idea es aprender algo diario, a pesar de que se trate de realizar una tarea monótona. “Si empieza pensando que no tiene las respuestas correctas, en el mejor de los casos obtendrá la verdad y en el peor de los casos podrá verificarlo”, señala el portal.
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3. Hacen muchas preguntas: Muy relacionada con el punto anterior, la idea no es siempre tener las respuestas sino generar nuevas preguntas. El consejo de Acción Preferente es que se asegure de que las preguntas que haga sean realmente curiosas.
4. Buscan algo nuevo cada día: la rutina y la monotonía logran coartar el ánimo de experimentar cosas nuevas. Pero a pesar de que sea algo que haga todos los días, puede ingeniárselas para hacerlo de formas distintas o con nuevos retos: “El sólo hecho de buscar algo nuevo que aprender cada día, aumentará tu sensibilidad por todo lo que nunca antes has considerado”.
5. Se concentran en el conocimiento que les falta, en lugar del conocimiento que ya tiene: En ocasiones le puede suceder que una persona que, aparentemente sabe mucho, pueda verse ignorante en un tema. Las cifras y los datos, son sólo eso, pero no muestra de inteligencia, por lo que las personas increíblemente inteligentes consideran cualquier tipo de conocimiento que puedan adquirir como una especie de puente para aprender aún más.
6. Exploran el origen de todo: de absolutamente todo. Fascinarse por los temas más complejos hasta los más sencillos permite ver el mundo con otros ojos y, con ello, ganar otros conocimientos.
7. Pasan tiempo con personas más inteligentes: ver el dominio de conocimientos en otros y sentarse a escuchar sus percepciones sobre la vida o el mundo, puede generarle nuevas ideas.
La idea es que comparta con personas que lo desafíen y amplíen sus fronteras, le hagan ver nuevos mundos.
Fuente: www.finanzaspersonales.com